Un pequeño grupo es la iglesia vivida en el hogar. Un ambiente donde los cristianos puedan cultivar la comunión unos con otros a través de la fe común y las afinidades personales. Es un espacio democrático, donde todos pueden ser escuchados y alentados y también donde todos deben escuchar y alentar. Es el ambiente propicio para el ejercicio de los talentos naturales y los dones espirituales. En la informalidad de un encuentro entre amigos, se comparte la vida en común para que, en la obediencia a la palabra de Dios, podamos gozarnos con los que se gozan y llorar con los que lloran. En compañerismo, el líder del grupo pequeño aplicará el aprendizaje compartido en los servicios de adoración, fomentará las disciplinas bíblicas y animará a los discípulos a vivir una vida profunda con Cristo.